Interpol aprieta el botón de alarma ante el letargo de la justicia y las fugas de Schütz y los Crousillat. Estos son sus probables paraderos.
La Interpol-Lima acaba de distribuir en sus 180 filiales de todo el mundo la solicitud de ubicación con fines de captura de Schütz y los Crousillat, quienes escaparon recientemente de Argentina al son de un tango paralelo. Información de inteligencia policial a la que tuvo acceso CARETAS ofrece preocupantes indicios y pistas inéditas sobre el paradero de ambos, entre otros prófugos más.
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Mapamundi de los que son buscados por la justicia anticorrupción en el Perú. n
Escribe AMERICO ZAMBRANO
UNA llamada telefónica desconcertó al grupo operativo anticorrupción de la Interpol-Lima. La comunicación provenía del gobierno de los Estados Unidos. El parco agente del Servicio de Inmigración de Miami solicitó «información actual de Ernesto Schütz». Requerían cuanto antes de su fotografía y huellas digitales. Colgó sin ofrecer mayores explicaciones.
Para entonces, el 7 de setiembre pasado, Schütz debía encontrarse en su lujoso departamento de la calle Riobamba 910 en Buenos Aires, vigilado muy de cerca por la justicia gaucha. Como se sabría luego, no ocurría así.
«La llamada del Servicio de Inmigración fue la primera alerta de que algo andaba mal con el viejo Schütz», dijo a CARETAS un oficial de la Interpol. Sin embargo, en los días siguientes no se tuvo noticia alguna sobre él. Quizá todo era una equivocación de los gringos, pensaron los policías peruanos.
Tres semanas después, el 1¼ de octubre, el escándalo de su fuga los golpeó como una bofetada. Al grupo anticorrupción de la Interpol le preocupa los indicios sobre la manito que la Policía argentina le habría brindado a Schütz Landázuri. Los agentes peruanos enviaron numerosos pedidos «urgentes» de información sobre el caso a sus pares porteños. No recibieron ni un solo mensaje. Ni una sola llamada.
Recién después de una semana, y cuando los hechos eran de dominio público, la Interpol-Argentina respondió por escrito: «Todo indica que el ciudadano Ernesto Schütz no estaría en su domicilio (…) Se ejecutan las acciones de inteligencia para ubicarlo».
Parecía un chiste de mal gusto. Sucede que se tiene conocimiento que escapó a inicios de setiembre y no en octubre, como se especuló en la prensa.
La Cancillería recibió noticias sobre la posible ubicación de Schütz en Suiza, donde al parecer se siente como en casa: su madre reside en Ginebra. Pero información de inteligencia obtenida por la Interpol-Lima indica que el empresario televisivo podría haber llegado a Miami con documentos falsos.
Hace una semana, uno de los agentes del Servicio de Inmigración de Miami volvió a comunicarse. Pidió más fotografías de Schütz Landázuri, los números de sus dos pasaportes y seis huellas digitales para cotejar información. «Los americanos no han confirmado nada, pero parece que al menos pasó por ahí», contó un oficial.
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Los Crousillat compraron expedientes y también silencios en Lima y Buenos Aires.
¿EL NUEVO POINT?
El caso de José Enrique y José Francisco Crousillat es sospechosamente similar. La Interpol alertó a su equivalente bonaerense sobre la posible huida de los empresarios. La Cancillería hizo lo propio en su momento. Sin embargo, en este caso el brazo de la ley fue muy corto.
Fuentes policiales aseguran que los Crousillat escaparon de Argentina -con dinero y maletas al hombro- también en setiembre, lo que sugiere coordinaciones con Schütz. La defensa de los prófugos habría jugado su partido aparte: fajos de dinero compraron expedientes y silencios.
Padre e hijo fueron ubicados en EE.UU. a inicios del 2001. En mayo de ese mismo año, el juez peruano David Loli envió a Washington una solicitud de detención preventiva para ambos, la que fue devuelta por falta de pruebas. Estas deficiencias allanaron su posterior fuga a Argentina. Una lástima, sin duda, pues los hechos indican que el gobierno de EE.UU. da luz verde a las extradiciones si éstas son sustentadas correctamente. Un alto oficial de la PNP que pidió no ser identificado narró que en diciembre de ese mismo año los Crousillat enviaron a un emisario a la Interpol. El sujeto ofreció US$ 5 mil a cambio de una copia del expediente y la negativa norteamericana, lo que utilizarían como prueba de una supuesta persecución. Aunque el pedido fue rechazado según los oficiales, esos documentos cayeron de todos modos en manos de los empresarios, probablemente facilitados por empleados de alguno de los juzgados anticorrupción.
La Cancillería sospecha de Chile como el destino de los Crousillat. La Interpol, de Brasil. El general montesinista Manuel Ortiz Lucero, recientemente extraditado de este último país, ofreció a los investigadores un dato revelador: muchos de los prófugos, entre ellos los Crousillat, planeaban refugiarse en el estado de Bahía. Con muchísimas playas discretas, el nuevo point de la mafia estaría ubicado en la Región Noroeste del país de la samba. Ortiz Lucero contó que ahí se han edificado condominios privados e inaccesibles. «Uno alquila una casita por US$ 300 al mes y nadie lo encuentra», dijo a los policías.
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El Baile de los que Faltan
Carencias en las extradiciones restantes.
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Embajadora Nita Gamio de Barrenechea y el cuadernillo de extradición de Fujimori. n
POR cierto, la debacle enfocó los reflectores sobre un tema crucial: el papel de los jueces anticorrupción en los procesos de extradición.
Documentos judiciales demuestran que la mayoría de magistrados desconoce aspectos claves del derecho internacional y los tratados de extradición. Muchos de los pedidos de detención preventiva y algunos cuadernillos de extradición han sido devueltos por falta de causas, o pruebas de delito, razonables. Y esto permite que los prófugos se pongan a buen recaudo hasta lograr evadir a la justicia. Nuevos casos conocidos a nivel policial que explican esta situación son los siguientes:
-Oscar Medelius Rodríguez. El ex notario de papel expectante en la presunta falsificación de firmas de País Posible fue ubicado el 22 de agosto del 2003 en Vermont, Virginia. El Tercer Juzgado Penal solicitó su detención preventiva, pero el expediente fue rechazado por el gobierno de EE.UU. debido a falta «de información requerida en el Tratado».
-Giancarlo Bresani Mier. El hijo del periodista Jorge Bresani, fue detectado el 26 de junio pasado en Simi, Valley, California. La solicitud de detención del Primer Juzgado Penal también fue devuelta a Lima, pues carecía de pruebas directas.
-Víctor Caso Lay. El 18 de junio, agentes del FBI lograron ubicar al ex contralor en Miami. Han pasado cuatro meses y aún no se le pide su arresto preventivo.
-Juan Marcelo Gullo. El ex director de la revista SI, durante el fujimorato, se encuentra con su familia en la ciudad de Rosario, Argentina, desde el 19 de abril pasado, según la Interpol. No obstante, aún no se le solicita su extradición por la vía diplomática.
-Víctor Malca Villanueva. Información de inteligencia indica que el ex ministro de Defensa fue ubicado hace un año en el estado de Maryland. No se hizo nada para detenerlo en su momento. Ahora se escondería en una guarida entre la frontera de EE.UU. y Canadá.
La lista es extensa y es pertinente recordar el caso de Alberto Fujimori. Hace una semana, la embajadora Nita Gamio, jefa de la Oficina de Asuntos Legales del Ministerio de Relaciones Exteriores, envió a Japón el segundo cuadernillo para su extradición. El gobierno nipón lo había devuelto hace unos meses por falta de pruebas. «Hemos hecho algunas precisiones al cuadernillo», dijo Gamio. Un funcionario del Ministerio de Justicia ofreció un diagnóstico alarmante sobre el entuerto: «El 99 por ciento de los jueces no conoce de causas razonables. No pueden sustentar sus cuadernillos de extradición y ello favorece a los prófugos».