Guerrilla tamil acepta derrota en Sri Lanka
Colombo.- Acorralada en menos de un metro cuadrado, la guerrilla tamil declaró que «la batalla ha llegado a su amargo final» y anunció un cese unilateral de los combates ante el derramamiento de sangre en Sri Lanka.
«Sólo nos quedaba una opción: eliminar la última débil excusa del enemigo para matar a nuestro pueblo. Hemos decidido silenciar nuestras armas», dijo el jefe de relaciones internacionales de los Tigres para la Liberación del Tamil Eelam (TLTE), S. Pathmanathan, indicó Efe.
«Esta batalla ha llegado a su amargo final. Contra todo pronóstico, hemos contenido a las fuerzas cingalesas (etnia predominante en la isla) sin ayuda, excepto el apoyo sin fin de nuestro pueblo», aseguró el jefe rebelde en la nota, colgada en la página web del TLTE, TamilNet.
El Ejército ceilandés, que acusa a la guerrilla de usar a los civiles como «escudos humanos», ha rehusado una y otra vez declarar una tregua y el TLTE ha seguido combatiendo a las tropas durante semanas pese a su situación de debilidad.
«Tenemos que hacer todo lo que podamos para detener esta carnicería. Si ello significa silenciar nuestras armas y entrar en un proceso de paz, eso es algo a lo que ya hemos accedido», dijo Pathmanathan.
Denunció que en 24 horas 3.000 civiles tamiles murieron y otros 25.000 sufrieron y no disponían de «atención médica».
Muy diferente es la versión del Gobierno, que dijo haber «rescatado» en tres días a los 50.000 civiles que el TLTE tenía como «rehenes» en una pequeña franja de territorio en el distrito norteño de Mullaitivu, a pesar de que hasta hace poco sostenía que no más de 20.000 personas se hallaban en la zona.
El presidente ceilandés, Mahinda Rajapaksa, proclamó el sábado, con una retórica triunfalista, que el TLTE ha sido «derrotado militarmente», y mañana se dirigirá a la nación con un discurso en el Parlamento, según una fuente citada por el rotativo local The Daily Mirror.
Sigue siendo un misterio el destino del fundador y líder de los Tigres, Vellupillai Prabhakaran, pese a que fuentes militares dijeron que recuperaron un cuerpo que se cree sería de él y cuya identidad estaba siendo confirmada. El cadáver del hijo, Chareles Anthony, de 24 años, fue localizado, según anunció el Ministerio de Defensa, citó AFP.
Las fuerzas del Gobierno tomaron el control el sábado de toda la costa norte de la isla, por primera vez desde que la guerra comenzó en 1983, eliminando cualquier posibilidad de escape para un grupo miliciano cuya derrota ha sido una derrota esperada durante meses.
El Ejército ha capturado en menos de tres años 15.000 kilómetros cuadrados de territorio que controlaban los Tigres.
El sangriento final de la guerra se produjo luego de que el Gobierno rechazó las solicitudes de una nueva tregua para proteger a los civiles y después de que los Tigres se rehusaron a rendirse y liberar entre 50.000 y 100.000 personas que, según Naciones Unidas, mantenían como escudos humanos.
El papa Benedicto XVI pidió a las facciones en lucha que garanticen la seguridad de los civiles atrapados en la zona de guerra, acotó AP.